QUE ES LA VISCOSIDAD ??
La viscosidad es la resistencia de un líquido a fluir.
En el contexto de los aceites para motor, se refiere a la capacidad del aceite de fluir a diferentes temperaturas.
COMO SE CLASIFICA LA VISCOSIDAD.
Los aceites para motor se clasifican utilizando la clasificación de viscosidad: SAE
SAE: La clasificación SAE se basa en la viscosidad del aceite a temperaturas específicas.
Por ejemplo, un aceite SAE 10W-30 tiene una viscosidad de 10 en frío (W significa Winter, invierno en inglés) y 30 a alta temperatura.
Los números más bajos (como 0W, 5W) indican aceites más finos que fluyen mejor a bajas temperaturas.
Los números más altos (como 20, 30, 40, 50) indican aceites más gruesos que ofrecen mejor protección a altas temperaturas y cargas.
TABLA CLASIFICACIONES SAE.
5w20: arranque en frio hasta -30ºC
10w30: arranque en frio hasta -25ºC
15W40: arranque en frio hasta -20ºC
IMPORTANCIA VISCOSIDAD EN EL MOTOR.
- Arranque en frío: Los aceites de baja viscosidad (como los 0W y 5W) son más fluidos a bajas temperaturas, lo que facilita el arranque del motor en climas fríos.
- Protección a altas temperaturas: Los aceites de alta viscosidad (como 40 y 50) son más gruesos y ofrecen una mejor protección a altas temperaturas y en condiciones de carga pesada.
SELECCIÓN ACEITE ADECUADO PARA EL MOTOR.
Es muy importante seleccionar el aceite con la viscosidad recomendada por el fabricante del vehículo, esto no dará una guía para el uso correcto.
Los fabricantes toman un término intermedio para el uso del aceite, pongamos como ejemplo un VW GOLF GTI 2.0 TFSI, el fabricante recomendará el uso de 5w30, pero para un uso general, quiere decir, lo mismo para ESPAÑA, que FINLANDIA o RUSIA.
Lógicamente para países con un clima más cálido como España, se podría utilizar sin problemas el 10w30 o 10w40, hasta incluso un 15w50.
ARRANQUE EN FRIO
La capacidad del aceite para fluir a bajas temperaturas es crucial para la protección del motor durante el arranque en frío.
Aceites de baja viscosidad (como 0W o 5W): Estos aceites fluyen más fácilmente en temperaturas bajas proporcionando una lubricación rápida y efectiva al arrancar el motor, reduciendo el desgaste.